Terapia Individual

Cada sesión es única en sí misma.

Dentro de ti existe un ritmo que da la pauta de todo lo que va transcurriendo en tu vida. Durante la terapia se da máxima importancia a respetar el ritmo que ofrece el espacio para que una Imagen Interior vaya reconstruyéndose paralelamente a lo que sucede en tu vida.

Así, en una escucha respetuosa, a través de la respiración, viajamos a la vivencia interior, hasta llegar a acoger la imagen, experiencia o dolor que te generaba el malestar.

Al respetar el ritmo propuesto por tu interior se produce una sanación suave, amorosa que facilita un dulce darse cuenta, a ti que estás sumergido en tu proceso vital.

La consecuencia immediata es la acogida de experiencias y memorias asociadas a la herida. A medio plazo llegas a la comprehensión de las estructuras que generan el sufrimiento y a cambiar creencias relacionadas con la vida. El resultado final es un nuevo posicionamiento, una nueva actitud vital que te ayuda a interiorizar que en realidad todo está en tus manos.

Tomarte un tiempo para hacer una serie de sesiones te permite ir profundizando en aquello que te ha llevado a hacer el proceso, a comprender el sentido, a cuestionar profundamente tu sistema de creencias, a sentir que puedes ser acompañado/a en un momento importante de tu vida.